La Blanquette y el Crémant de Limoux

Se presume que hacia 1531, los monjes benedictinos de la abadía de Saint Hilaire, cercana de Limoux, elaboraron un vino espumoso poco común en sus cavas. Entonces Limoux sería presuntamente el lugar de origen del primer vino efervecente del mundo. La Blanquette es el nombre con el cual se conocería este peculiar vino, que obtendría una de las primeras denominaciones de origen francesas "La Blanquette de Limoux" y "La Blanquette de Limoux Méthode Ancestrale". Aunque en total son cinco las denominaciones de origen de esta región, tres corresponden a vinos efervecentes, las dos anteriores y El Crémant de Limoux.
La Blanquette privilegia la cepa tradicional Mauzac, aunque esta permitida la Chenin y la Chardonnay en ensamblaje en un máximo de 10%, sus botellas pasan al menos nueve meses en cava. En cuanto al Crémant, éste se elabora principalmente de Chardonnay y Chenin con las variedades accesorias Mauzac blanc y Pinot noir, su estancia en cava es mucho más larga que la Blanquette pues pasa al menos quince meses en ella.
A la vista la Blanquette presenta un amarillo paja con reflejos verdes o amarillos con burbujas finas y persistentes, su nariz evoca las flores y frutos de la primavera así como la manzana verde y la miel, para degustar dentro de los primeros dos años despues de su compra e ideal para acompañar todo tipo de platillos. El Crémant presenta también tonalidades pálidas con reflejos dorados y burbujas muy finas, se distingue por su nariz de flores blancas con notas sutiles cítricas y de pan tostado, para acompañar aperitivos, pescado y carnes blancas.
En nuestra boutique podrás encontrar los vinos espumosos Premiere Bulle Sieur d'Arques, con reconocimientos como el "TOP 50 Best Value French Wines" que otorga DECANTER y la "Gold Medal" de las Vinalies Internationales.